jueves, 1 de febrero de 2018

Aneurisma

Quisiera, compartir más que un instante en el tiempo; quisiera, que fueras más que sólo compañera de un corazón bradicardico, tantas veces distante, tantas veces ausente. 
Ojalá, suturaras con un total impar de puntadas, la brecha entre mi piel y la tuya, ojalá y fuésemos uno solo, y no habitantes, tu de tu universo y yo del mío.
Quisiera ser mas que una pared arterial que se debilita; aneurisma a punto de reventar.

Anestesia

Quiero cerrar mis ojos y entrar en un sueño profundo, cómo si de anestesia se tratara, no pretendo soñar, sentir, hablar o pensar; que pase el tiempo que tenga que pasar, que si rio o lloro, que sea ignorada mi risa y mi llanto olvidado, quiero dormir hasta que la vida misma sea solo un distante recuerdo, hasta que tus ojos existan sólo en mis versos, y tus manos sean olvido.
Quiero despertar y sentir que todo es nuevo, distinto; volver a sentir el suelo bajo mis pies descalzos, frío. Que el café matutino sea negro azabache, amargo, y caliente mi cuerpo mientras resbala suave por mi tráquea.
Quiero dormir, hasta volver a ser, hasta que mi lóbulo frontal quede hipoxico, y mis miocitos dejen de despolarizarse sin control.

Dulce y tierna

Te busqué, por todos lados, en todas partes, y hoy, te encuentro en mis versos, en mis horas cálidas y en mi taza de café cada mañana.
A veces, también existes en mi sangre, que transita infinitamente por un corazón asistolico, insuficiente; en ese torrente rojizo brillante, que sólo tú y yo conocemos; en esas viejas calles, que tantos días hemos recorrido con los sueños entrelazados.
Prefiero, mil y una vez, repetir los mismos versos en tu boca, y encontrar vida entre tus delgados labios. 
A veces, yo te abrazo y tú, dulce y tierna, te aferras a mi pecho, de a poco, te vuelves mía y yo tuyo.

Miénteme

Voy, recogido pequeños trozos de mi alma que dejaste olvidados tras de ti, mi cielo.
Mienteme una vez más cariño,
Que aún no comprendo cómo vivir sin tu amor fingido

Inhalo mentiras de las que pende mi vida, y exhalo miedo a perderte de vista; ya sé que este amor es ficticio, de película, y aún así, te suplico; vuelve, y miente una vez más mi vida.

Dime una mentira que me dure para siempre o al menos una dure más que este amargo aguardiente.
Acércate lento y besame sin tiempo
Mienteme una vez más, que ya no respiro y mi corazón sin ti, ya no late.

martes, 2 de enero de 2018

Mal praxis

Mal praxis


Pálida y delgada piel, agitas despiadada mi trémulo sistema limbico.
He visto tu inmensidad, y ahora sé, no puedo vivir de ella lejos; ¿dónde es que te has escondido?
Eres humareda blanca que se eleva en línea recta, o una hoja seca,  que desciende involuntaria en una noche de otoño.
Y yo, yo soy roca liza en el fondo del río, pertenezco a un distinto orden, a otro universo. Y sin embargo reconozco tus suaves siluetas a través de mi ventanal líquido.
Yaces famélica y distante.

Con un sólo movimiento, de tu cuerpo, desordenas mis constelaciones neuronales.

He soñado que rozas los bordes de mi líquida prisión, y diminutas mensajeras gritan al unísono ¡iluso!

A penas escucho un distante murmullo, al ahogarme en envidia y recelo.
Y tu, me resumes en un gesto, mientras frunces despiadada el ceño.